Por José Gregorio Torres
Pese a la actual situación que vive la Alcaldía de Carache, tanto a nivel político como económico, está institución continúa dando respuesta a los ciudadanos de esta noble e histórica población la que en medio de todas las dificultades que ha tenido que sortear con un cuarto de siglo de malos y menos malos gobernantes, y que hoy se enfrenta a la crisis política más fuerte de su historia, con un alcalde inhabilitado, y por otra parte, un Concejo Municipal con limitados recursos para dar respuesta a las demandas que está gran urbe amerita, a la que sin duda le preocupa lo que será en los años por venir, donde su principal problema latente es el acueducto, al que se le suma la carencia de recursos para solucionar al menos en parte este dolor de cabeza, mucho más en temporadas de lluvia cuando sufre los embates de las aguas no tratadas y, por otro lado, en temporada de sequía que también es un problema por la falta de un tanque que cumpla con la demanda de agua de la creciente población que demanda más capacidad del preciado líquido.
Sin embargo, vemos una Alcaldía proactiva y sin descanso tratando con las uñas de dar respuesta eficiente y oportuna, pero con las dificultades acumuladas durante todos estos años y que hoy se mantienen como una bomba de tiempo que en algún momento reaccionara de manera irreversible, porque ya es un hecho que ni el gobierno nacional, así como tampoco el regional, tienen disposición de atender este cáncer que ya es metástasis y que si la cura está prevista con la construcción de un acueducto nuevo, la mengua vivida por los gobiernos anteriores, ya es casi seguro que no será posible en un corto tiempo darle solución, debido a que este problema acumulado es una generalidad en todo el estado.
Ya es mucho decir que desde la Alcaldía de Carache pese a sus recursos propios limitados y los que el Gobierno Nacional y regional pudieran aportar, no son suficientes para la gran cantidad de problemas acumulados, vialidad, salud, educación, vivienda y servicios públicos, en donde vemos que se están realizando algunos trabajos de bacheo en las calles de Carache, con limitados recursos, pero que la población está consciente que esto tiene necesariamente su lectura política y que sin duda redundará también en las próximas elecciones donde se tendrán que elegir nuevos representantes en estas entidades. Pero ya con un pueblo consciente e inteligente que sigue en espera de tiempos mejores, por ahora el apoyo a la administración del alcalde Yohanti Domínguez se mantiene como opción viable, en comparación a otras administraciones nefastas que en tiempos de abundancia no lograron sustanciales mejoras para el pueblo. No sería justo exigir más a quien tiene limitados sus recursos.
