Por Ing. Carlos Lozada
Hace unos días, mientras hojeaba lecturas sobre liderazgo y emprendimiento, me encontré con una frase atribuida a Jeff Bezos, fundador de Amazon, que me hizo detenerme:
“Trabaja duro, diviértete, haz historia.”
Tres verbos que, más allá del marketing empresarial, encierran una filosofía de vida que bien podríamos adoptar en nuestro querido municipio Carache, especialmente en estos tiempos de incertidumbre económica.
Trabaja duro: el músculo invisible del progreso
Trabajar duro no es solo acumular horas bajo el sol o frente a una pantalla. Es tener propósito, disciplina y constancia. En Carache, donde el potencial agropecuario es inmenso, el trabajo duro se traduce en sembrar con fe, cosechar con paciencia y resistir con dignidad.
En medio de la crisis, cuando los recursos escasean y las oportunidades parecen esquivas, el trabajo duro se convierte en el primer paso para la adaptación. No hay espacio para excusas. Hay que producir, aunque sea con poco. Porque en la austeridad también se puede innovar.
Diviértete: el alma que sostiene el esfuerzo
Divertirse mientras se trabaja no significa frivolidad. Significa encontrar sentido, alegría y comunidad en lo que hacemos. En Carache, hay quienes cultivan con música, quienes atienden a los turistas con una sonrisa genuina, quienes convierten una venta de una comida típica en una experiencia cultural.
La diversión en el trabajo es resistencia emocional. Es la chispa que nos permite seguir adelante cuando todo parece cuesta arriba. Es lo que convierte una jornada difícil en una historia que vale la pena contar.
Haz historia: dejar huella en lo cotidiano
Hacer historia no siempre implica grandes gestas. A veces, es simplemente atreverse a hacer algo diferente. En Carache, hay emprendedores que están transformando con creatividad lo que otros ven como limitaciones. Hay productores que, con pocos insumos, están logrando cosechas limpias y sostenibles. Hay empresarios que están apostando por el turismo rural, mostrando que nuestro municipio tiene mucho que ofrecer.
Pocos, muy pocos, están viendo la luz. Pero esa luz existe. Y quienes la siguen están trabajando duro, se están divirtiendo en el proceso y, sin saberlo, están dejando huella. Están haciendo historia.
Desde El Trapiche: sembrar ideas, cosechar futuro
Desde esta columna, quiero invitar a todos los caracheros a mirar más allá de la escasez. A ver en cada dificultad una oportunidad para adaptarse, para crear, para persistir. Porque si algo nos enseña esa frase de Bezos es que el éxito no se mide solo en cifras, sino en el impacto que dejamos en nuestra comunidad.
Trabajemos duro. Disfrutemos el camino. Y hagamos historia, desde el corazón de Carache.